la vida no deja de darnos golpes. y la mayoría de ellos no los vemos venir y nos pillan de improviso.
normalmente, la gente considera que esos golpes son los que nos hacen madurar, poco a poco. sin embargo, algunos de ellos no son merecidos, e incluso muchos de ellos son absurdos, dolientes e injuntos.
y en esos momentos, nos caemos. se nos cae el alma a los pies, nos pesa el corazón, se nos apaga el cerebro y nos dejamos caer al suelo. en esos momentos, el cerebro humano solo piensa en quedarse ahí abajo, tan abajo que ya no haya otro sitio donde caerse. porque duele, pero es un dolor constante al que al final te acostumbras. quedarte en el suelo es una opción que a veces nos parece demasiado tentadora. simplemente porque pensamos que no merece la pena levantarse. ¿para qué? es probable que volvamos a caernos.
y con esta mentalidad poco a poco nos vamos hundiendo en un pozo cada vez más negro, donde no existe la alegría, ni el amor, ni las buenas intenciones, ni los momentos mágicos. no existe nada más que no sea nuestro dolor y nuestra soledad. es ese dolor que se lleva por dentro, ese dolor que ahoga pero no lo suficiente para matar.
sin embargo, en el momento en el que ya lo das todo por perdido, encuentras una razón, por absurda que sea, para levantarte una vez más. y aunque cueste, aunque duela te levantas. el corazón vuelve a latir, las piernas a andar... la cabeza se pone en ON. y es esa razón la que te hace seguir luchando día a día. puede ser un amigo, un familiar, un nuevo amor, un animal, una canción... esa razón puede ser miles de razones a la vez, pero lo importante es que hace que te vuelvas a sentir viva. es una razon que te ilumina el pozo oscuro en el que te encuentras. y te levantas. y empiezas a andar.
todos sabemos que nos volveremos a caer. porque el ser humano está destinado a la decepcion, al dolor, al miedo... si, el ser humano está programado para sentir más el dolor que la felicidad. pero debemos ser fuertes, e intentar superar esos momentos de caida para levantarnos, sonreir a la vida, sonreir a las posibilidades.. y no cerrarnos en banda. tenemos que ser capaces de llorar y reir al menos la misma cantidad de veces. tenemos que ser capaces de levantarnos, porque nadie lo va a hacer por nosotros.
hasta en el peor de los momentos debemos sacar fuerzas de flaqueza, levantarnos e ir dando pequeños pasos que nos den confianza para mirar hacia delante.
caerse esta permitido, levantarse es una obligacion
seamos fuertes, seamos fuertes para coger el toro de la vida por los cuernos y enfrentarnos a ella con una sonrisa por cada lágrima derramada. solo asi seremos capaces de descubrir razones para avanzar... razones que siempre merecen la pena...
yo me he caido. tengo las rodillas peladas, el corazon dolorido y sin embargo, intento encontrar esa luz que me guie por este sendero oscuro. creo que la he encontrado. es una luz brillante, limpia, que me ilumina y me da calor... si, creo que empiezo a ser capaz de andar otra vez.... nadie sabe a donde me llevaran mis pasos. tengo miedo, me siento insegura, pero se que mi razon para levantarme sera mi angel de la guarda en mi camino. y como todos los caminos conducen al mismo lugar, espero encontraros alli... de pie.
yo no estuve alli cuando todo paso. me di cuenta despues... con el tiempo. mirando desde mis propios ojos hacia una imagen de mi mismo que no es exactamente yo, pero con la que encuentro una simpatia y relacion obligadas. vi pasar al descubrimiento, a la primera mirada, la primera palabra, el primer beso, el primer desengaño, el conocimento de que estoy donde muchos estuvieron antes y por supuesto, el despertar. y ahora me siento, miro mis manos y les pregunto ¿que podeis hacer salvo cubrirme la cara? pues eso mismo, cubrirte la cara, introducirte en tu propia espiral donde volveras a tus entrañas dormitando en acciones simples y familiares que te devuelvan tu energia y puedas retirarlas delante de un nuevo capitulo que parezca tremendamente novedoso.
ResponderEliminarpues espero que ese capitulo empiece ya. porque te lo mereces, y porque no puedes seguir escondiendo esa preciosa forma de ser que tienes detras de unas manos cansadas....
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